viernes, 2 de enero de 2015

La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús (Filipenses 2:5-11)

La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús,
quien, siendo por naturaleza Dios,
    no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse.
Por el contrario, se rebajó voluntariamente,
    tomando la naturaleza de siervo
    y haciéndose semejante a los seres humanos.
Y al manifestarse como hombre,
    se humilló a sí mismo
    y se hizo obediente hasta la muerte,
        ¡y muerte de cruz!
Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo
    y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre,
10 para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla
    en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra,
11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor,
    para gloria de Dios Padre.