domingo, 4 de enero de 2015

Salmo 72:1-2, 7-8, 10-13

Oh Dios, otorga tu justicia al rey,
    tu rectitud al príncipe heredero.
Así juzgará con rectitud a tu pueblo
    y hará justicia a tus pobres.

Que en sus días florezca la justicia,
    y que haya gran prosperidad,
    hasta que la luna deje de existir.
Que domine el rey de mar a mar,
    desde el río Éufrates hasta los confines de la tierra.

10 Que le paguen tributo los reyes de Tarsis
    y de las costas remotas;
que los reyes de Sabá y de Seba
    le traigan presentes.
11 Que ante él se inclinen todos los reyes;
    ¡que le sirvan todas las naciones!
12 Él librará al indigente que pide auxilio,
    y al pobre que no tiene quien lo ayude.
13 Se compadecerá del desvalido y del necesitado,
    y a los menesterosos les salvará la vida.